La ciudad de Tulum estaba a unos pocos kilómetros de donde nos alojábamos. Desde temprano, y por primera vez en nuestra estadía en México, llovía a cántaros. Casi creyendo que la excursión se iba a suspender nos avisaron que igualmente se hacia. Mas tarde, el sol se impuso y nos permitió disfrutar de esta maravillosa ciudad.
La zona arqueológica de Tulum se encuentra totalmente amurallada y está compuesta por distintas ruinas. Entre ellas el observatorio astronómico conocido como el templo del Dios del viento posicionado estratégicamente respecto a los astros celestes. Desde el mismo se puede observar el segundo arrecife mas grande del Mundo, con una longitud de aproximadamente 900 km que van desde Cancún hasta las costas de Honduras.
Pero la ruina más importante de todas es "El castillo" (la cual se observa en todas las postales de la ciudad junto a sus bellísimas playas), relacionada directamente con la luna. Esto se debe a que cuenta con 28 escalones al igual que el ciclo lunar. Allí mismo se practicaba el sacrificio humano con la finalidad de pedir a sus dioses un favor sobrenatural. Esto era común en la temporada de sequía en donde le pedían al Dios Chaac para que lloviera. Allí solo habitaban los sacerdotes mayas.
Además, esta zona arqueológica, cuenta con sus propias playas antiguamente utilizadas como puerto por los mayas, las cuales son una de las más importantes y hermosas de México.
Sin saberlo, nos enteramos que allí ocurre otro equinoccio. El mismo se produce durante el solsticio de verano en donde una estrella se forma sobre una de las entradas de "el castillo". Con este equinoccio los mayas determinaban las temporadas de lluvia. En síntesis, lo utilizaban como un calendario de siembra.
Tulum es otras de las ciudades que uno no puede dejar de visitar si va a México.
Les dejo algunas fotos.